21.5.09

el poeta es un fingidor

heterónimo
He amado verdaderamente a alguien, respondió en voz baja Campos.
Entonces yo te absuelvo, dijo Pessoa, te absuelvo. Creía que en tu vida tú sólo habías amado la teoría.
No, dijo Campos acercándose a la cama, también he amado la vida, y si en mis odas futuristas y furibundas nada me he tomado en serio, si en mis poesías nihilistas todo lo he destruido, hasta a mi mismo, has de saber que en mi vida yo también he amado, con consciente dolor.
Pessoa levantó una mano e hizo una señal esotérica. Dijo, te absuelvo, Álvaro, ve con los dioses sempiternos, si tú has tenido amores, si tú has tenido un solo amor, estás absuelto, porque eres un ser humano, es tu humanidad la que te absuelve.
(Los tres últimos días de Fernando Pessoa, Tabucchi)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hermoso fragmento. Si aquellos que aman, sabiendo hacerlo o sin saber, quedan absueltos, entonces ¿será toda la humanidad absuelta, o sólo parte de ella?
Me has puesto a pensar,
Saludos,
Julieta

zacharias dijo...

sólo los que no aman ya están condenados

Alicia Martín dijo...

El amor mueve el mundo...

Reina del Mango dijo...

Qué alivio ser de carne y hueso. Preferentemente de carne.

zacharias dijo...

carne, sí, y un soplo de desasosiego

Licencia Creative Commons
Gracias Pero No Gracias por Ornelia Cabrera se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.