Mamá, quiero ser artista

Era pequeña. Hablaba bajito. Por dentro era inmensa. Altísimos sueños de grandeza. Soñaba como sólo se sueña tras haber visto mucho cine. Comedias musicales de los años cincuenta. Cada madrugada (tan temprano era) subía a la guagua sudando. Tratando de concentrar parte de esa fuerza que sólo derrochaba en la imaginación. Hoy. Tiene que ser hoy... Se veía a sí misma cantando y bailando entre los asientos. Alto, muy alto. Y los demás la acompañaban en una coreografía que de repente se descubrían aprendida de siempre...hoy, tiene que ser hoy... Se decía canturreando bajito y toda roja, sin que los otros sospecharan qué hermosos pasos de baile se escondían tras su carita asustada... Una mañana de estas, ya verán, se decía por fin, acurrucandose a soñar un poco más. Al fin y al cabo era tan temprano aún ...
(A Pepa gonzález, con cariño)