11.8.13

Interrogantes

Inés Perada
Había sido muy amable. Eso era cierto. Nadie lo podía negar. La señora sonrió confusa. Un poco asustada  cruzó la calle todo lo rápido que la fragilidad de sus piernas le permitían. Apartó la mirada del chico que estaba ayudándola. Se despidió enseguida con un gracias, gracias...y se alejó. Desconcertada, iba pensando: Fue muy amable la verdad. Quién iba a pensar que un tipo así fuera capaz de un gesto tan bello... En la acera de enfrente, el skin-head observada divertido la prisa de la vieja al seguir su camino. Era una interrogación con patas. 

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Gracias Pero No Gracias por Ornelia Cabrera se encuentra bajo una Licencia Creative Commons Atribución-NoComercial-SinDerivadas 3.0 Unported.